En esta novela gráfica se describen los inicios de la historia de amor entre el narrador y una joven madre portadora del VIH. Basada en la experiencia del autor, el tono personal e intimista de la obra la hacen cercana y sincera, y plantea con mucha naturalidad el tema de las relaciones con personas seropositivas, sin tabúes ni complejos. Las viñetas, en blanco y negro y con un estilo particular, no me han entusiasmado, aunque sí me parecen muy expresivas. Un cómic autobiográfico que se lee de una sentada y resulta interesante y ameno.
hace 6 años