George R.R. Martin vive su mejor momento. Su saga literaria de fantasía épica, «Canción de hielo y fuego«, ha vendido 15 millones de ejemplares en todo el mundo cuando aún faltan dos entregas, y su adaptación televisiva «Juego de tronos», ha enganchado a millones de espectadores con una trama en la que se mezclan la lucha por el poder, la intriga, el sexo y la violencia, y en la que ningún personaje está a salvo de morir en el siguiente capítulo.
El escritor estadounidense, de 63 años, ha logrado un estatus que ha llevado a algunos a compararle con el considerado padre de la fantasía moderna, John R.R. Tolkien, tras una larga carrera como escritor de ciencia ficción y una década como guionista en Hollywood que le aportó más frustraciones que satisfacciones.