México despide este lunes a Gabriel García Márquez, fallecido el jueves en esta capital, con un homenaje abierto a todos sus admiradores y que incluirá compases de Bartók y vallenatos, así como las flores amarillas a las que era aficionado.
Los presidentes de Colombia, Juan Manuel Santos, y de México, Enrique Peña Nieto, estarán presentes en el acto que se desarrollará en el Palacio de Bellas Artes, en Ciudad de México, a partir de las 16.00 hora local (21.00 GMT).
Ese palacio, en el centro histórico de Ciudad de México, uno de los principales lugares turísticos de esta capital, ha servido de escenario para despedir a diferentes personalidades de las artes, nacidas aquí o que eligieron México para radicarse.
El escritor Carlos Fuentes, una de las principales glorias literarias de México, fue homenajeado en el Palacio de Bellas Artes el 16 de mayo del 2012, en un acto al que asistió el presidente mexicano de entonces, Felipe Calderón.
También fue el lugar elegido para despedir al premio Nobel de Literatura Octavio Paz, cuando murió en 1998, y recientemente allí mismo se lo recordó de nuevo al cumplirse el centenario de su nacimiento.
Al actor Mario Moreno «Cantinflas» lo lloraron los mexicanos en el Palacio de Bellas Artes cuando falleció en 1993, y también fue despedida allí la cantante Chavela Vargas, costarricense de origen y que vivió ocho décadas en México, hasta su muerte en 2012.
Según la directora del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), María Cristina García Cepeda, las cenizas de Gabo serán depositadas en el vestíbulo del palacio a primera hora de la tarde, y estarán allí durante tres horas.
Después de visitar anoche a la viuda de García Márquez, Mercedes Barcha, García Cepeda dijo que también dará un mensaje el presidente de Conaculta, Rafael Tovar y de Teresa, la máxima autoridad cultural de México.
La directora del INBA señaló que los compases del húngaro Béla Bartók se unirán a los ritmos del vallenato, como homenaje a un hombre que, según sus amigos, era fanático de la música y a quien le gustaba cantar y bailar cuando encontraba ocasión.
También habrá flores amarillas, las preferidas por el autor de «Relato de un náufrago» y que solía utilizar para adornar su solapa cuando aparecía públicamente en ocasiones como la fecha de su cumpleaños, el 6 de marzo.
Aparte de Santos no se ha dado a conocer qué otras personalidades estarán presentes en los actos de mañana.
No está totalmente confirmado qué pasará con las cenizas de García Márquez. El pasado viernes, el embajador de Colombia en México, José Gabriel Ortiz, dijo que la intención es que se dividan entre los dos países.
Pero después de hablar con la viuda de Gabo, Mercedes Barcha, declaró a los periodistas que, en todo caso, será la familia la que finalmente decidirá cómo y dónde descansarán los restos.
García Márquez nunca perdió su nacionalidad colombiana, a pesar de los ofrecimientos que siempre se le hizo en México para que se naturalizara aquí.
La familia tendrá que decir también qué pasará con una obra que estaba escribiendo García Márquez, «En agosto nos vemos», según dijo en declaraciones reproducidas hoy por la prensa local Cristóbal Pera, de la editorial Random House.
Pera no dio detalles sobre esa obra, en la que al parecer estaba trabajando el premio Nobel en la última etapa de su vida.
Según se anunció desde Bogotá, después del homenaje que se le brindará en México, Colombia hará otro, el martes, en la Catedral Primada de la capital, en un acto encabezado por el presidente Santos.
México, 20 abr (EFE)
Un escritor puede morir, màs las palabras NO, es asì q Gabriel Garcia Marquez
permanece vivo en las escrituras