La ambición, el afán de poder y el deseo de dominio de unos pocos pueden provocar la falta de entendimiento entre los pueblos y, con ello, desencadenar guerras. Fernando Almena, uno de nuestros más prestigiosos y representados autores de teatro juvenil, ofrece con su soltura, amenidad y humor, más que una obra pacifista, una crítica al trasfondo de las injustas situaciones que originan el enfrentamiento entre los pueblos.