Avalado por el gran éxito de su anterior libro, “Manual para mujeres de la limpieza”, las expectativas que tenía puestas en este segundo recopilatorio de relatos de la autora era muy alto, y para mi plena satisfacción no se han visto defraudadas.
Se hace difícil diferenciar cuando estamos ante una narración autobiográfica o de autoficción, pero en estos veintidós relatos, que siguen una línea cronológica, se reconocen una y otra vez escenarios y situaciones comunes a los de la vida de la autora. Una vida atribulada y llena de altibajos de una mujer cuya personalidad se transmite en su fascinante escritura, intensa y expresiva, en la que explora con magnificencia las simas del alma humana. Espléndidas historias de supervivencia, dramáticas y tiernas a la par, con un toque de ironía que es un goce para el lector.
Como ella misma escribe en “Polvo al polvo”: “Hay ciertas cosas de las que la gente nunca habla. No me refiero a las cosas difíciles, como el amor, sino a las más bochornosas, como por ejemplo que los funerales a veces son divertidos o que es emocionante ver arder un edificio.” Y Lucia Berlin habla de esas cosas, es capaz de lograr el relato más admirable desde cualquier pequeña anécdota.
En mi opinión estamos ante un compendio de obras maestras altamente recomendable, para leer, releer y no parar de disfrutar. Una lectura muy amena, de gran calidad y belleza, de los mejores relatos que he leído últimamente.
hace 5 años
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