La familia Melops es un caso aparte. Con ellos, la diversión está garantizada, y a veces también el peligro. Pero los Melops son valientes y decididos. No les da miedo pilotar aviones, excavar en busca de petróleo, bucear en el océano a la caza del tesoro ni explorar oscuras cuevas. Porque la mejor aventura es disfrutar cada día en familia de los ricos pasteles y tartas que prepara mamá Melops.