"Y de repente, como si el miedo fuera una capa de nubes sobre la que se había elevado, Haoyou miró a su alrededor y vio el mundo entero por debajo. Y era suyo. Como un escudo de plata embadurnado de azul y verde, palpitante, convexo, complejo, bello. Él era el único que dominaba esta luminosa región...