Rosa está desesperada. Su exnovio, que rompió con ella cuando este se enteró de que le había sido infiel, está a punto de casarse con una chica guapísima, pero antes de tirar la toalla definitivamente, ha decidido pedirle perdón, confesarle que sigue enamorada y cruzar los dedos para que le dé una última oportunidad. A cuatrocientos años de Rosa, William Shakespeare está aún más desesperado que ella, ya que está a punto de morir a manos de sir Francis Drake, el famoso pirata inglés, tras haberlo encontrado en la cama con su esposa. Sin embargo, cuando está a punto de darle la estocada final, se da cuenta de que no siente dolor ni puede hablar... porque ahora es Rosa la que controla su cuerpo y se mente. A partir de ese momento, ambos se verán obligados a convivir en un mismo cuerpo y capear todos los problemas en los que se haya involucrado el joven escritor, que no son pocos. La única forma de que Rosa pueda abandonarlo, será encontrando el amor verdadero pero, ¿cómo va a lograrlo, estando atrapada dentro del cuerpo de un hombre? Debo reconocer que la trama de esta historia es de lo más original. El autor sigue fiel a su estilo y le imprime su tan característico tono cómico a la novela, donde predominan los diálogos y las situaciones disparatadas. A pesar de que se habla del amor, este no es ni de lejos el eje principal y uno de los puntos fuertes de la novela será descubrir cómo logrará la protagonista abandonar el cuerpo de Shakespeare y regresar a su anterior vida. El desenlace me ha parecido razonable y coherente, dentro de la locura que representa esta historia, aunque quizás a muchos lectores, les sabrá a poco. Sin embargo, creo que logra transmitirnos el mensaje que el autor quería hacernos llegar: que antes de amar, debemos aprender a querernos a nosotros mismos.

Un libro muy divertido y entretenido. No te cambia la vida, pero es ideal para desconectar y pasar un buen rato.

Libro que se lee muy bien y rápido aunque yo no termino de encontrar la gracia a los libros de este autor. Sigue la línea de Maldito Karma que, para mi gusto, está más entretenido. No me ha aportado mucho, me ha parecido más bien aburrido.

Sí lo que buscas es divertirte, reírte, las historias de David Safier lo consiguen, al menos conmigo...

Fácil de leer y divertido. Me gustó mucho.

Libro muy simple pero muy muy entretenido. Es una historia bastante original y, aunque a veces resulte un poco precedible no es para nada una molestia. Los personajes son entrañables y divertidos, se les acaba cogiendo mucho cariño. Además, a lo largo de la novela evolucionan, lo que le añade siempre un toque. Sigue la linea de Maldito Karma :)

Divertido, ideal para leer durante las vacaciones ya que no es muy pesado ni para analizar mucho. Al terminar me quede extrañando a Shakespeare.

Bien sería que no estaba yo en buen momento para leer este libro pero me ha parecido malo no, malísimo. En ningún momento me ha sacado una sonrisa. Es más, a veces si hubiera tenido a la Rosa (la prota) delante le habría abofeteado por inculta e inepta. Maldito Karma aún me resulto gracioso, pero este ....

Es ideal para una tarde libre pues una lectura rápida, te entretiene y si lo ves mas a fondo puede que medites en el mensaje del libro

Fácil y rápido de leer, me gusto como se van intercalando los personajes genero, costumbres, pasado y presente. Surrealista en algunos momentos y tierno. Moraleja sencilla pero necesaria por supuesto, querernos a nosotros mismos para querer a los demás. En momentos ha conseguido que suelte alguna carcajada.

Una lectura ligera, en línea con las otras obras del autor. Genial cuando se quiere hacer un paréntesis entre lecturas más densas. Para pasar un rato entretenido y desconectar.

Es el que menos me ha gustado de Safier. Al principio parece que va a ser divertido pero conforme avanza el libro hasta resulta complicado saber cuál de los personajes está hablando. No me enganchó como Maldito karma pero a pesar de ello es un libro ideal si se quiere leer algo ligero, original y breve.

un libro ligero, de lectura sencilla y muy muy divertido.

Un libro para pasar un rato entretenido sin más pretensiones. Logra arrancar alguna que otra sonrisa (que no es poco en los tiempos que corren). Para desconectar un poco o para esos momentos que apetece leer algo ligerito, viene fenomenal.

Muy entretenido y con situaciones muy cómicas. Ideal para desconectar de otro tipo de lectura con las situaciones embarazosas de los protagonistas viviendo en la época del otro. Recomendable.

Muy ameno y divertido. Lleno de situaciones cómicas, malentendidos. Hasta que Rosa y Shakespeare se unen es un poco flojo, pero luego mejora mucho. Para pasar un rato entretenido y divertido es genial.

Podría decir también más de lo mismo, pero ni de lejos, los anteriores ejemplares al menos te sacan alguna sonrisa e incluso carcajada, en esta tercera obra apenas he saboreado momentos dulces y divertidos, es una pena.

La primera mitad del libro sí me ha hecho sonreir más de una vez; en cambio, a partir de la segunda mitad he empezado a sentir vergüenza ajena con el libro. No sé si es por la falta de rigor con la biografía de Shakespeare o por qué, pero no me ha gustado mucho. Las bromas carecen de gracia y recurren al humor facilongo. Una lástima. "Yo mi me..contigo" empezó gustándome más que "Maldito karma" pero al menos de aquel guardo un recuerdo agradable, de éste sólo decepción.

Más de lo mismo, no ha conseguido ni siquiera sacarme una sonrisa, se me ha hecho muy, pero que muy pesado.

Libro idoneo para desconectar, sonreir y pasar un rato ameno.