Francine Prose explora en este libro la compleja relación entre el artista y su musa. De una forma brillante, irónica y provocativa saca a la luz con gran sensibilidad e inteligencia las fuentes esquivas y emocionales del proceso creativo. ¿Qué tienen en común las musas que aparecen en este libro? Todas eran hermosas y sensuales, con un atractivo poco convencional. Todas amaron a sus artitas, y los artistas las quisieron a ellas, pero también les inspiraron con una intensidad y un sentimiento propios del eros. Para todos estos artistas, el amor de sus musas, o a sus musas, fue un elemento imprescindible para crear su arte.