Usagi Yojimbo basa sus aventuras en una figura muy conocida de la historia japonesa, el mítico samurái Miyamoto Musashi, una suerte de Cid nipón, cuyas aventuras narró Eiji Yoshikawa —en España editado primeramente por Roca y actualmente por Quaterni— y que ha servido como motivo para un buen número de películas, videojuegos y cómics —aparte del que nos ocupa está, por ejemplo, Vagabond. El Miyamoto de Sakai es un conejo —‘usagi’ significa ‘conejo’— en un mundo de animales antropomórficos que ambientan el Japón feudal. Salido inicialmente en tiras no demasiado amplias —aquí se recopilan las que se dieron en la editorial Fantagraphics, en un primer volumen de dos—, son historias relativamente independientes, pero siempre dinámicas y entretenidas. La velocidad de la acción y la amplia galería de personajes, que con pocos trazos quedan perfectamente caracterizados, son los principales activos de un cómic que ya se ha hecho su hueco como una las series más exitosas y apreciadas. Esta edición solventa los problemas de su primera aparición en España —lo hizo con el orden alterado— y lo hace en un formato atractivo y cuidado, con el añadido de varios extras. (Carlos Cruz, 6 de marzo de 2017)
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