Es la historia de dos hermanas muy diferentes entre sí, tanto en el carácter como en lo físico, una es médico cooperante en países necesitados, y la otra es una ama de casa que casi no se ha movido de la isla en la que vive. Reciben una herencia de una desconocida y la médico tiene que volver a casa, allí se reecuentran las dos.
Es una lectura amable y fácil, que engancha enseguida. Es una novela de sentimientos y recetas de pan. De sentimientos, porque transmite mucho, con momentos muy conmovedores, sin caer en la sensiblería. Y de recetas, porque cada capítulo empieza con una de panes y dulces, y el pan de limón con semillas de amapola tiene mucho protagonismo en la novela.
Puede parecer una novela sólo para pasar el rato y entretenerse, que lo puede ser, pero hay algo más, trata temas importantes, como las adopciones internacionales, el trabajo en las ONG, el rol de la mujer en la sociedad actual, el cáncer, etc... que puede hacer parar a algún lector reflexivo a plantearse diversas cuestiones.
Es una historia preciosa, muy bien construída desde el principio hasta el final, y narrada con mucho encanto.
Son preciosas las descripciones del paisaje mallorquín, en concreto de Valldemossa. Además en sus páginas hay un canto de amor hacia la cultura, lengua, tradiciones y a la gente de esa preciosa isla.
Muy recomendable.
hace 6 años
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