Diez años después de la finalización de la guerra, el protagonista de esta novela (alter ego de Barea), regresa a una España y un Madrid que nada tienen que ver con lo que dejó en las postrimerías de la Guerra Civil. El estraperlo, la sotana, la prostitución encubierta, la beatería, la miseria y la carestía e incluso el esoterismo conviven en la sociedad cainita y poco de fiar con que se encuentra Antolín Moreno. Si bien todo este repaso social es notable y la Raíz Rota es una verdadera obra de ficción, cosa que no lo era la Forja de un Rebelde, esta obra de Arturo Barea contiene algunos errores narrativos de bulto que provocan que no alcance toda la intensidad que en determinados momentos parece estar a punto de alcanzar la historia. De cualquier manera, el dibujo de los personajes me parece muy correcto y desde luego recomiendo su lectura. AS
hace 5 años