Nos encontramos frente a una novela de ficción histórica, con dos tramas que van evolucionando en el tiempo. Por un lado Blanca, arqueóloga española que desde niña esta embrujada por el tesoro del rey poeta al-Mutamid de Isbiliya, que reinó en la taifa sevillana de 1042 al 1069 Por otro Furhud, joven de Agmat, y según la tradición familiar descendiente del mismo rey poeta que yace enterrado en un túmulo desconocido en su pueblo, es raptado de joven por un grupo terrorista islámico pro-saharaui, y que, con el tiempo, se convierte un uno de los comados más activos. A pesar de que la trama tiene mucha parte de histórica, en ella aparecen ucronías (hechos que en realidad sucedieron de otra forma pero que en la novela se toman como ciertos), que le dan una perspectiva muy especial, como por ejemplo el emirato independiente de Granada dentro del reino español, el grupo terrorista CAMA (Cabila Árabe del Magreb y al-Andalus) o la existencia en la actualidad del Puerto de la Victoria (puerto fundado por los romanos que se supone se ubicaba en Santander). En la novela aparecen muchos temas actuales: amenaza terrorista, crisis migratoria, el Sahara, la mujer, el machismo, el poder, la corrupción, el fanatismo, la avaricia,.... Con una gran agilidad narradora, Abel efectua una magnifica descripción de los personajes, de sus personalidades y de los escenarios y ambientes por donde acaece la novela, personajes que van evolucionando a lo largo del libro (sobretodo Blanca y Farhud) Durante la lectura, se pone de manifiesto, la grandísima labor de investigación, de conocimiento histórico, arqueológico y arquitectónico que se aprecia tras las palabras de los protagonistas. Destaca también la recreación de esos ambientes sevillanos, las expresiones, "dejes" y formas de hablar y de explicarse, las descripciones de los personajes y de los "antros" ,tan vexhaustiva que te transporta a ellos. Inicialmente choca la narración coloquial y el uso habitual de palabras mal sonantes "ostia".. "joder".. aunque rapidamente el estilo te engancha y te cuesta dejar de leer. He disfrutado mucho de la lectura de este libro, ha sido una lectura conjunta , con la participación del autor. Las dos tramas del libro se entrecruzan magistralmente en el tiempo hasta confluir en el desenlace final. Sin duda, voy a leer el segundo libro, EL MORO, donde, según la reseña, me encontraré una historia complementaria.
hace 4 años