Galardonada con el premio Ondaatje 2006, esta obra del periodista y escritor inglés James Meek recrea el marco grandioso y dramático propio de la gran novela rusa, en una suerte de fábula moderna en la que los destinos de un puñado de personajes, encerrados en un fascinante microcosmos, se dan cita formando una trama vertiginosa, perfectamente construida. En las postrimerías de la guerra civil que siguió a la revolución de Octubre, el remoto e inhóspito pueblo de Yazik alberga a una pequeña secta que vive de espaldas a las convulsiones del mundo, sigilosamente entregada a la vida comunal. Los iniciados del «Paraíso de las Palomas Blancas» liderados por el enigmático Balashov, aspiran a convertirse en ángeles por medio de insólitos rituales. Anna Petrovna, una seductora viuda de guerra vinculada misteriosamente al líder de la secta, vive entre ellos y mantiene una vacilante relación amorosa con un teniente del destacamento de la legión checa acuartelado en el pueblo. Por último, la llegada del carismático Samarin, supuestamente evadido de la prisión más remota de la tundra siberiana y que dice ser perseguido por un monstruoso criminal apodado el Mohicano, amenaza el precario equilibro de esta desolada comunidad. Cuando el chamán indígena del pueblo aparece muerto, la sospecha y el terror se adueñan de la vida en Yazik.