Bueno, la idea que a uno le queda de este libro es que, si Clancy describe el resto de países en sus novelas con el rigor que describe a España en ésta, debe asesorarse de verdaderos cretinos. Es sencillamente alucinante. Sus diálogos son tan penosos como en el resto de sus novelas pero la trama tiene ritmo y es una historia entretenida. La temática es de espías, miltares, generales golpistas,... a los que afortunadamente ponen freno unos extradinarios y superhonestos comandos especiales americanos. Vamos, una tremenda estupidez, pero si uno lo lee como si ocurriera en otro planeta y le va este género puede pasar unas horas de entretenimiento. Mi nota sólo ha tenido esto último en cuenta.
hace 11 años