Sorprendentemente, este libro es gran desconocido, y es una pena, porque para mi ha sido de los mejores de la autora. La trama es muy rápida y desde el primer momento sientes el peligro de los jinetes y lo peligrosos que son los caballos. Puck es cabezota e intrépida, pero no es una protagonista insoportable, entiendes por qué toma ciertas decisiones dentro de sus posibilidades. Sean y su forma de ver la isla y los caballos ha sido una delicia de leer. Casi se mimetiza con los caballos de agua gracias a su trama personal. La relación entre ambos no prima lo amoroso, sino el respeto y la comprensión, además del apoyo en lograr sus metas. La historia es original, con unos caballos de agua que a veces parecen demonios marinos y pueden arrancarte la cabeza en todo momento. El hecho de tener guiños a la mitología celta es un añadido, al que se suma la siempre poética pluma de la autora, que logra invocar el miedo, la superación y la presión, que sufren sus personajes. Es un libro muy recomendable, que habla de la familia, de la libertad, de establecer lazos con otros y del respeto a los animales.
hace 6 meses