Peregrine Dalmay, conde de Lisle, es un apasionado de la arqueología, pero cuando su familia le exija hacerse cargo de un importante asunto familiar a cambio de financiar sus expediciones, no le quedará más remedio que abandonar Egipto y regresar a Londres para cumplir con su deber. Para Olivia Wingate-Carsington, una dulce y adinerada pelirroja, miembro de una célebre y aristocrática familia de estafadores, el «asunto familiar» del conde podría significar su última gran aventura antes de enfrentarse a un respetable –y probablemente aburrido—futuro, aunque sea al lado del único hombre al que nunca ha sido capaz de manejar. Por ello no duda en acompañar a Peregrine a un tenebroso y lúgubre castillo escocés que oculta un escandaloso secreto. Pero, tal vez, el mayor peligro de todos sea la llama que arde en sus tercos corazones.