El 11 de septiembre de 2001 las Torres Gemelas de Nueva York se derrumban como consecuencia de un ataque terrorista. Millones de personas, sobrecogidas e incrédulas, contemplan la catástrofe en la pantalla de los televisores. El domingo 7 de octubre es el cielo de Kabul el que se ilumina trágicamente con los destellos de las bombas y los misiles. Los pocos días transcurridos entre un hecho y otro han bastado para que se aventuren interpretaciones y el temor a la guerra -"nueva", "difusa", "la primera guerra del siglo XXI", se ha dicho- se extienda por la faz de la tierra.