El País de los Báquiros no está al norte, como dicen las geografías escolares; ni al sur, como piensan sus habitantes; ni más allá de las lagunas, como pudiera creerse viendo pasar volando en aquella dirección, bandadas de garzas viajeras. El País de los Báquiros está cerrado en un círculo de selvas vírgenes, a la mano derecha del trópico de Capricornio. Partiendo del tinte sugerente que envuelve la obra desde el mismo título, este libro de relatos contribuye a alimentar la imaginación del lector a base de una prosa que desborda mágia , expresividad y talento narrativo. La capacidad para evocar mundos propios y extraños, la sutileza con la que suceden las figuras literarias y el ambiente metafórico que envuelve cada historia, es una invitación a la lectura entregada.