LA BÓVEDA DE LOS RECUERDOS

LA BÓVEDA DE LOS RECUERDOS ALONSO SAINZ, CARLOS

Portada de LA BÓVEDA DE LOS RECUERDOS
Nota media 8,50 Muy bueno 2 votos 2 críticas

Resumen

Carlos Alonso Saínz. Madrid, 1962. Estudios de Derecho en la U. Complutense y de Geografía e Historia en la UNED, exfuncionario de la Administración, ha necesitado cumplir sus sesenta para tener el sosiego necesario y ponerse a hacer lo que más le apasiona: contar historias.

Comprometido durante años con diversas causas sociales y especialmente con aquellas vinculadas a la Recuperación de la Memoria Democrática, aterriza en el universo editorial con esta su primera novela. Una historia circular que, en varios escenarios temporales, viaja del gélido paisaje del archipiélago de Svalvard, en Noruega, a la arena de las playas del sur de Francia, en el campo de refugiados de Argèles-sur-mer. Las historias de varios personajes se enmarañan desde los últimos episodios de la Guerra Civil a los primeros de posguerra, el desarrollismo y la Transición en grandes y crueles brochazos que han dejado heridas en varias generaciones.

En «La bóveda de los recuerdos», se narra la historia olvidada de Adolfo, un héroe anónimo de la Guerra Civil Española cuyas aventuras lo llevan a cruzar fronteras, enfrentar peligros y presenciar el lado oscuro de la humanidad. A través de las páginas, somos transportados a la España devastada por la guerra, la Francia ocupada y América Latina, donde miles de refugiados buscan reconstruir sus vidas. Una historia sobre la importancia de preservar la memoria, la búsqueda de la verdad y la fuerza del espíritu humano.

Un homenaje a quienes lucharon por un futuro mejor y un recordatorio de que la esperanza puede florecer incluso en las circunstancias más difíciles.

2 Críticas de los lectores

Daniel Matesanz se jubila con solo sesenta años. Ante el reto que supone la jubilación siente inevitable realizar un balance de su vida y acometer esos asuntos que se pospusieron “para cuando se pueda”, porque su vida hasta el momento no la ha sentido muy relevante. El autor plasma esto de un modo muy certero explicando la vida de Daniel hasta entonces en un solo párrafo. No parece gran cosa. El miedo a perder los recuerdos, a resultar irrelevante, le atenaza: Olvidar es perder, como si nunca hubiera existido. Los recuerdos no son sobre como pasaron las cosas, sino sobre cómo queremos ahora que hubieran pasado. Leyendo un artículo sobre una isla noruega en la que, en una bóveda bajo tierra, está ubicado un almacén de semillas mundial que guarda estas en previsión de catástrofes, siente la necesidad de ir a conocerlo. Cree haber encontrado la metáfora, el simbolismo perfecto: sueña con una Bóveda de los recuerdos. En ella quiere reconstruir la historia de su tío Adolfo Matesanz, ya que es una deuda que contrajo con su padre Roberto y consigo mismo cuando se le contagió “la herida”. Cree que ahora debe rendir cuentas y pagar ese tributo. Para lograrlo cuenta con la ayuda de sus escritos de cuando era niño y adolescente en sus cuadernos Centauro. Impulsivamente, se sube a un avión y pone rumbo a Svalbard, en Noruega, cargado apenas con sus cuadernos, su ordenador y una idea.

En el avión conoce a Pepa, una mujer con un parche en un ojo que le da conversación. Una vez en Svalbard, se vuelven a encontrar y él le cuenta su misión. Ella le recomienda que el modo de crear su Bóveda de los recuerdos es escribir un blog, de modo que le ayuda a crearlo y le incita a contar la historia escribiendo lo que sí sepa e inventando lo que no. A partir de ese momento, el libro se escribe a dos tiempos: el presente de Daniel y Pepa y el pasado de Adolfo Matesanz en los tiempos postreros de la guerra civil española. En un giro sorprendente, la propia Pepa se verá atrapada también en la historia cuando descubre que sus propios familiares también están involucrados.

Carlos Alonso Sáinz, utiliza la historia de los antepasados de Daniel y Pepa para ilustrar una nueva mirada a los últimos meses de la guerra civil, a la postguerra y los tiempos convulsos posteriores. Busca una manera de reflejar esa “herida” que dejó la guerra no solo en los directamente implicados, sino también en sus hijos y reclama que se amplíe a más generaciones. Con una prosa trabajada y buen ritmo, de frases cortas y estilo directo, el argumento se va desvelando pasando por la perspectiva de los diferentes protagonistas. El autor ha creado unos personajes psicológicamente complejos que portan una gran carga emocional y los ha situado en atmósferas únicas, cargadas de simbolismo; tanto las del presente, ayudadas por las descripciones de los paisajes y el ambiente de la isla noruega, como las del pasado, para las cuales se apoya más en lo sensorial.

No se puede decir que se trate exactamente de un libro político pero sí es un libro de denuncia, comprometido con la idea de la Recuperación de la Memoria Democrática, en el que además de las heridas de la Guerra Civil Española también se abordan de un modo lateral temas como el machismo o la lgtifobia, y que pretende servir de homenaje a los combatientes, los refugiados y los represaliados. (Inma Muñoz, 12 de agosto de 2024)

hace 3 meses
10

Agradable sorpresa de un autor novel. De lo mejor que he leido ultimamente. Muy bien escrito con una historia que engancha , emocionante en algunas partes, evocador y muy buenas descripciones.

hace 3 meses