La muerte de Albino Luciani, papa Juan Pablo I –en 1978, al mes de su elección– es uno de los grandes misterios del siglo XX. Interrogantes elementales quedaron sin verdadera respuesta: ¿de qué murió Juan Pablo I?, ¿cuál fue realmente su figura?, ¿hubo cambio de rumbo en la Iglesia? Treinta años después, el caso sigue abierto. El juicio no se ha hecho donde tenía que hacerse, pero está en la calle.