El amargo don de la belleza es la historia de una experiencia espiritual única en el mundo antiguo: el nacimiento y el ocaso de la primera religión monoteísta, promovida por el faraón Akenatón y su reina Nefertiti. El enigma de estos dos personajes se apodera del pintor Keftén, cuya obsesión se va haciendo extensible a la capital que la pareja real ha levantado como símbolo de su revuelta religiosa: la Ciudad del Horizonte de Atón, conocida también como la Ciudad del Sol.