Carmen Alboroch nos habla de los cambios que han sufrido las mujeres para ser, sobre todo, esposas y madres, de la lucha por salir del anonimato, el sueño de la equidad, el valor de las amigas, la maternidad y la sexualidad de las mujeres solas.
A partir de los 50 años, y más aún con la edad de jubilación, y con la calidad y la esperanza de vida activa que tenemos en Occidente, se abren muchas oportunidades para disfrutar de los placeres de la vida gracias a varios factores: un mayor control sobre el propio tiempo, más independencia económi...