Esta es una obra original de Blas Infante. El notario andalucista escribió todas y cada una de las frases de este libro, aunque Manuel Pimentel y Antonio Manuel han seleccionado y ordenado sus textos –con frecuencia dispersos– para centrarse en su teoría de Andalucía y del andalucismo, dotando de coherencia al conjunto y facilitando la comprensión global del pensamiento del Padre de la Patria Andaluza. Se trata de una revelación y un arma. Una revelación porque deja hablar al propio Infante, sin añadirle palabra alguna. Un arma, porque hiere la verdad de lo que dice. De Blas Infante se ha escrito mucho. Fetiche para unos, hereje para otros. En el fondo, a todos molesta. Porque quien se mueve, ofende al que no lo hace. Porque quien se muestra altivo en su independencia, molesta al que lame la mano que le da de comer. Y así era Blas Infante. Crítico con las naciones que se repartieron el planeta, con los partidos que se repartieron la democracia republicana, con los latifundistas que detentaron la propiedad ilegal de la tierra... con la masa que todo lo consiente. Pensar y sentir como Blas Infante, todavía hoy, resulta peligroso. El lector se encuentra ante el libro que mejor resume su pensamiento. Los textos están entresacados de Fundamentos de Andalucía, Toda la verdad sobre el complot de Tablada y el Estado Libre de Andalucía, El Ideal Andaluz, La dictadura Pedagógica y varios inéditos. Una obra completa, sin llamadas a pie de página, como escrita de un tirón por don Blas Infante. Porque realmente fue él quién la redactó. A Blas Infante lo mataron antes de tiempo para no morir nunca. Su discurso resulta demasiado contemporáneo para ser conveniente. He ahí el arma, he aquí su teoría de Andalucía y los fundamentos políticos que la sostienen.