Lo comencé a leer por la buena crítica que tenía entre mis conocidos, pero una vez leído reconozco que esperaba más. El relato está bien escrito, de lectura fácil, con el añadido de efecto de muñecas rusas; es decir, de historia que encierra a otra historia y así hasta cuatro narradores distintos. Sin embargo, la historia del personaje central es un tanto rocambolesca. Casi me gusta más la del militar desahuciado.
hace 8 años