Aunque no leo poesía, esto es lo más bonito que ha caído en mis manos de este género. No es exactamente poesía pero es de una sensibilidad increíble. Todos deberían leerlo.

Hay clásicos que no envejecen bien, o que dejan de tener interés en el contexto actual. En mi opinión, esto es lo que me ha pasado con Platero y yo. No le he encontrado gracia, ni interés, ni me ha resultado entretenido.

Intenté leerlo en la adolescencia y no pude, muy bonito sí pero el argumento... ¿qué argumento? Ayer lo terminé con lágrimas en los ojos, es un libro bonito que habla de cosas bellas o de cosas feas con palabras muy hermosas, es una obra para disfrutar de un maestro de las palabras que nos habla de lugares, personas, animales y recuerdos que ama. Vale la pena darle una oportunidad.

"Es la soledad como un gran pensamiento de luz. De vez en cuando, Platero deja de comer y me mira... Yo, de vez en cuando, dejo de leer y miro a Platero". Una delicia que hay que releer cada cinco o seis años.

Hay poco que decir sobre Juan Ramón Jiménez, escritor imprescindible. Este fue mi primer libro elegido. Mi amor por los animales me hizo elegirlo de la biblioteca de mi madre a los 7 años, me lo devoré en un día terminando con un sofocón que me duró varias semanas. Para mí es EL libro.

Un clásico imprescindible y maravilloso. Hermoso relato.

Fue el primer libro que me leí nada más llegar a Perú y tengo un muy buen recuerdo tanto del libro como de mi estancia en el país.

Me gustaron mucho las primeras paginas en las que hablaba sobre Platero, pero me costó un poco seguir con la lectura y acabarla, aunque esto se debe a que no es de la temática que a mi me gusta leer.

Clásico de la literatura escrito por el premio nobel. Tiene capítulos muy breves, algunos buenos y otros pasables por su brevedad. Recomendable.

Está bien escrito, pero no me gustó. Tal vez lo leí muy rápido o siendo muy joven. Había escuchado mucho sobre este libro, así que me esperaba otra cosa. Probablemente le de otra oportunidad y cambie de opinión. No sé.

Te deja impactado por su gran riqueza lingüística, su primoroso lirismo, su extremada dulzura y su extraordinaria belleza. Una joya poética que debe leerse a pequeños sorbos, con calma y sin prisas. Recomendable para todas las etapas de la vida.

Me atrevería a decir que es el libro más hermoso que he leído, hay belleza por todas partes, las palabras tan estilizadas, perfectamente cuidadas, las descripciones maravillosas, la ternura, la inocencia, esa poesía tan acogedora que llega al corazón, me derritió. Creo que suelen pensar que es un libro para niños, no lo es. No me imagino haberlo leído más joven, no lo hubiese asimilado. Juan Ramón Jiménez sin dudas nos regaló una obra maestra. Me encantó.

Lo leí de pequeña y lo he vuelto a leer de mayor, y, aunque me ha supuesto sensaciones diferentes, me ha emocionado y me ha gustado mucho en ambas ocasiones. Este año, con motivo del centenario de la obra, he dedicado dos posts en mis blogs: "Cien años de Platero" http://thorykira.wordpress.com/2014/08/12/cien-anos-de-platero/ donde hablo un poco del autor la obra y algunos pasajes que me gustan mucho; y "Platero y Cía." https://estefanialfonso.wordpress.com/2014/11/19/platero-y-cia/ una exposición que he visitado el pasado mes de noviembre en Huelva, de donde soy.

Este libro lo leí ya de mayor, y me arrepentí de no haberlo leído de pequeña. Es un libro precioso, lo recomiendo a todo el mundo. Sobretodo a los niños.

Este libro me hizo lector. Desde que lo leí a los 8 años no he parado de leer, hace despertar contento y maravilla en el corazón. Lo he leído varias veces desde entonces, cada vez es igual, cuando este libro se abre, la magia sucede.

Me ha parecido un libro precioso, con una prosa poética exquisita y de gran riqueza léxica. Estructurado en capítulos cortos, el narrador/autor le habla a su burro Platero, con el que inevitablemente nos encariñamos. A lo largo de un año, de primavera a primavera, el autor nos transmite, mediante sus palabras, el amor que siente por Moguer, su pueblo natal, la belleza de la naturaleza, además de múltiples escenas cotidianas que muestran la realidad de la época y que probablemente vivió en su infancia. Es un libro para leer y saborear con calma. Excelente.

Una hermosa historia, la leí de adolescente, muy buenos recuerdos de esa época.

Un clásico con mayúsculas. Lo leí de crío, y quizás algún día vuelva a leerlo. No soy amante de la poesía, pero sin duda es un buen libro para introducirse a ella.

El final es un asco, muy triste.

Muy bonito. Está muy bien. Todo un clásico a la altura del Principito y Juan Salvador Gaviota. De lectura obligada. Un clásico. No me explico como tiene tan pocos votos.