«Es una historia de amor pasional entre una dama y un caballero llegado de las Cruzadas dispuesto a participar en una más: la que supuso la Batallas de las Navas de Tolosa». Quien así habla es Juan Eslava Galán y lo hace sobre su nueva novela ‘Últimas pasiones del caballero Almafiera‘ que este mismo martes sale a la venta publicada por Planeta.
En ella, según ha declarado a Europa Press, traslada al lector hasta 1212 con el «objetivo de hacerle pasar un rato divertido y, de paso, informar de algunos pasajes de la historia», sirviéndose para ello de una de las contiendas más relevantes de la Edad Media por cuanto supuso el inicio del declive del poder musulmán en la Península.
De este modo, el conflicto bélico que preparan los cinco reinos cristianos liderados por Alfonso VIII y bajo el auspicio del Papa Inocencio III se convierte en el fondo de la historia de amor entre Gualberto de Marignane –caballero provenzal que acude a Zaragoza demandado justicia para recuperar su feudo y se encuentra enrolado en la tropa hacia la cruzada contra los moros– y doña Eliabel, esposa de su rival, con la que protagoniza un romance a la sombra de la comprensiva abadesa de Fontevraud.
Así, Eslava Galán (Arjona, Jaén, 1948) se sumerge en los preparativos y el desarrollo de la Batalla de las Navas de Tolosa, de la que el próximo 16 de julio se celebra el octavo centenario, para dar cuenta de una época «muy distinta» a la dibujada en el imaginario colectivo actual por influjo «de las películas de Hollywood» que presentaban «todo muy bonito» entre distintas culturas, «cuando la verdad es que no fue así».
Junto al amor y la guerra, el tercer «componente fundamental» es el humor, tal y como ha resaltado el autor de la obra. Para ello, las aventuras se narran por boca de uno de los juglares que iban de lugar en lugar para entretener al pueblo con su música, cante y don de la palabra. «Contrasta cómo eran las cosas entonces con respecto a cómo creemos ahora que serían», ha apuntado el escritor, para quien el tono jocoso ayuda a presentar esa realidad que pudo ser dura y que no siempre casa con la imagen idealizada más extendida.
La elección de esta contienda como contexto de la novela responde a dos razones fundamentales: por estar «muy familiarizado» con ella, debido a que la había estudiado con anterioridad en diversas publicaciones y por formar parte de la cultura jiennense, elemento común en muchas de sus obras. Fue el caso de la que precedió a las andanzas de Almafiera: ‘Rey Lobo’, en la que viajó aún más en la historia hasta la civilización ibera, cuyo desarrollo fue especialmente notable en la provincia de Jaén.
BASE HISTÓRICA FIRME
Como hizo entonces, en ‘Últimas pasiones del caballero Almafiera’ vuelve a envolver la ficción en una «base histórica firme» gracias a una documentación y una ambientación rigurosas, propia de un medievalista que une su conocimiento a su habilidad narrativa para reflejar el día a día de ese principio del siglo XIII por el que pasan reyes, arzobispos, damas, doncellas, caballeros y trovadores.
A recrear con fidelidad ese ambiente ayuda, además, la inclusión en el libro de un glosario con términos y expresiones arcaizantes, así como la descripción pormenorizada de trabajos, vestuarios, costumbres o gastronomía junto con mapas y dibujos de la vestimenta y las armas de las tropas cristianas y musulmanas que se enfrentaron en las Navas de Tolosa.
Eslava Galán, junto a su amigo y escritor Arturo Pérez Reverte –al que convierte en personaje de la novela como el caballero Pérez Reverter– ha tenido la oportunidad de conocer in situ el escenario de esta contienda que cambió la historia. Lo han hecho tras visitar Baños de la Encina y su impresionante castillo de Burgalimar y conocer los detalles en el centro de interpretación de la batalla ubicado en el municipio de Santa Elena.
LA CAROLINA (JAÉN), 7 (EUROPA PRESS)