A los cien años de la publicación de su novela más reconocida, «La Bien Plantada», y a los sesenta y cinco de su muerte, Eugenio D’Ors parece seguir condenado al purgatorio, según Xavier Pla, experto en el intelectual catalán y autor de la edición «Historias lúcidas», que recoge sus mejores novelas.
Eugenio D’Ors (Barcelona 1881-Vilanova i la Geltrú, 1954) «el primer intelectual moderno en la España de primera mitad de siglo XX que se presenta a través de los periódicos con sus glosarios», fue el gran impulsor del movimiento cultural de El Noucentismo catalán, y una figura inclasificable que criticó a la modernidad siendo el más modernos de todos.
Así se desprende de esta antología «Historias Lúcidas», que recupera la obra de esta importante figura cultural y ha editado la Fundación Banco de Santander en la colección que, desde hace años, recupera a grandes figuras en la sombra de la Generación del 27 o de la primera mitad del siglo XX.
Para Borja Baselga, director de la Fundación, recuperar la obra narrativa de D’Ors es «hacer justicia literaria a uno de los grandes de la cultura española y catalana del siglo pasado».
«Siempre difícil de encasillar, la figura de D’Ors abarca desde el crítico y ensayista de arte al filósofo, al político, al novelista e incluso al descubridor de un género en 1906, el Glosari (el glosario), bajo el pseudónimo de Xenius, primero en catalán y luego en castellano», ha subrayado Baselga durante la presentación del libro.
Andrés Trapiello lo define en un texto que acompaña al volumen, que se presenta junto con una selección de 16 dibujos realizados por el propio D’Ors, como «uno de los espíritus más originales de su tiempo, lo que teniendo en cuenta precisamente el tiempo que le tocó vivir significa también que fue uno de los espíritus más contradictorios».
A la figura de D’Ors, que tiene «luces y sombras», hay que aproximarse en opinión de Xavier Plá, «sin prejuicios ideológicos ni apriorismos metodológicos… sin ira, pero con todo el conocimiento».
El autor de «La Bien Plantada», que se codeaba con Picasso, Dalí, Casas o Cézanne, Matisse y Derain, hizo con esta obra el ideal femenino del Noucentismo, con una mezcla de culturas mediterráneas, de Grecia y Roma.
Esta antología reúne «Sijé o del secreto de unas vacaciones» (1928-1929), considerada una obra genial; «Oceanografía del tedio» (1916), de la que el cineasta Marc Recha hizo la película «El cielo sube»; «Magín, o loa previsión y la novedad» (1921) y «El sueño es vida» (1922), en la que existe una profunda huella de Freud, ya que d’Ors fue uno de los primeros conocedores e impulsores del psicoanalista en España.
También incluye «Historias de las esparragueras» (1919) y «Aldeamediana» (1942), una obra en la que Pla vio a D’Ors como «pesimista, dramático y reaccionario», y que está dedicado al mariscal Pétain.
D’Ors, filósofo y crítico de arte también, «escribió sus novelas con ánimo filosófico. Se trata de narraciones difíciles que solicitan un esfuerzo del lector, aunque no es oscuro ni hermético; pero no cabe duda, de que exige un esfuerzo, cosa que por otra parte es un placer», ha precisado Xavier Plá.
Un creador que como periodista decía que tenía que escuchar las palpitaciones del tiempo, y que todo lo que no fuera tradición era plagio. Un intelectual europeo que odiaba el nacionalismo catalán y el español y que tuvo gran repercusión en Europa.
Madrid, 22 nov (Carmen Sigüenza / EFE)