El documental «José y Pilar», sobre la vida del fallecido nobel portugués José Saramago y su esposa, la periodista española Pilar del Río, se presentó hoy en Nueva York como parte de su carrera para ser nominada a mejor película extranjera en la próxima edición de los premios Óscar.
«La película es novedosa en la forma de contar la historia, y a la vez es muy humana y universal, tiene toda la legitimidad para ser nominada e incluso para ganar», dijo hoy ante la prensa su director, el portugués Miguel Gonçalves Mendes, sobre las posibilidades de la obra que ha dirigido.
«José y Pilar», para la que se grabaron más de 200 horas de metraje, retrata la vida profesional y personal de la pareja desde comienzos de 2006 hasta finales de 2008, durante el proceso creativo, la elaboración y el lanzamiento de la novela «El viaje del elefante».
«La película deshace algunos tópicos sobre la vida del escritor», valoró por su parte Pilar del Río, que también participó en la presentación, «no es la vida de glamour que muchos se creen que llevan, los espectadores se dan cuenta de la presión que hay», añadió.
Precisamente fue la vocación de cambiar la imagen que se tiene del escritor lo que llevó a Gonçalves a dirigir la cinta, con la que tenía la intención de «hacer un retrato intimista del autor».
«A Saramago a veces se le ve como a alguien muy serio y yo no entendía cómo alguien que coloca ese grado de humanidad en sus personajes podía ser el que algunos decían que era», explicó el cineasta.
La película fue la elegida por el Instituto Cinematográfico y Audiovisual luso para representar en los óscar a Portugal, un país donde ya la han visto 30.000 espectadores, mientras que 40.000 lo han hecho en Brasil, según dijo su director.
La cinta ya tiene distribuidora en Estados Unidos y está previsto que se estrene en abril en este país, pero todavía tiene que ser seleccionada por la academia estadounidense para competir por la codiciada estatuilla, ya sea en la categoría de mejor película de habla no inglesa o a mejor documental.
A pesar de que representa a Portugal, en la producción de la película participa España, donde se rodó buena parte del metraje ya que Saramago vivió durante muchos años en ese país.
Fue el carácter español lo que le hizo «aflojar el gesto a Saramago, ya que él era muy serio», dijo su viuda durante la conferencia de prensa en el Instituto Cervantes.
La ciudad de Granada o la isla de Lanzarote, donde el escritor y su mujer vivían desde 1993 y donde el autor de «La caverna» murió el 18 de junio de 2010 son algunos de los escenarios españoles que aparecen, aunque también se siguen los pasos de Saramago y su esposa por Argentina o México.
Nueva York, 1 nov (EFE)