Hay montones de famosos en la tele. Y la más famosa de todos ellos es la guapa, siliconada y maquillada Serena Dawlish, estrella de la telenovela Coombe Ridge Crescent. Cuando ella aparece en la pequeña pantalla, el país se paraliza y los índices de audiencia se disparan. Las mujeres sueñan con ponerse su ropa. Los hombres, con arrancársela.
Pero la verdadera fama es una carrera de fondo. No se puede desfallecer ni un momento y cualquier medio es válido para permanecer en la cumbre. Claro que siempre es difícil distinguir al amigo del enemigo, y el camino está lleno de trampas. ¿Será el nuevo programa Soy madre de un famoso una de ellas?