Hay cosas que las madres, sencillamente, no te cuentan. Porque no quieren. Y porque no quieren estropear tus sueños. Ni los suyos. Ellas no te cuentan que los maridos de las amigas no se pueden tomar prestados, aunque tengas intención de devolverlos luego. Ni que parir es doloroso, pero que lo que v...