Cuando me pidieron describir el libro su origen, razón de ser y público objetivo, me quedé como se suele decir, en blanco. Aclaro, no fue por falta de esmero ya que pensé y repensé el asunto, hasta que llegué a la conclusión de la imposibilidad explicativa que comprende en sí toda pasión. En este caso concreto el libro fue la consecuencia de una ingobernable necesidad interior, que se me impuso bajo la forma de la escritura (y en éste caso particular, de poesía). Es decir que salió como surgen todas aquellas cosas de la vida que son por el mero hecho de que no podrían no ser.