El libro tiene una premisa muy interesante, el problema es que en las primeras 50 páginas ya se expone esa idea, y hasta llegar a las 400 se convierte en una eterna repetición de la misma idea una y otra vez hasta volverse completamente soporifero y desesperante

De lectura rápida por la sencillez del lenguaje y la estructura, el libro ofrece unas cuantas ideas para la reflexión, si bien llega a hacerse repetitivo hasta el punto de querer saltarte algunas partes. El protagonista no lo mejora con su ristra interminable de estadísticas, sus continuas referencias a la pistola y otros aspectos que le obsesionan y que el lector va descubriendo a lo largo de la novela. No obstante, hay que reconocer el toque de humor, ironía y sarcasmo que se refleja en la páginas, no solo a través del protagonista, sino también de otros personajes, como el psicólogo.

Directo, contundente, inteligente,... Un libro que el propio Palahniuk hubiese firmado.

Aun siendo compleja, lo es por las cosas que dice y no por como lo dice, que a mí entender es lo difícil. La complejidad de esta novela te entra con absoluta facilidad. Comprendes toda su profundidad sin gran esfuerzo por tu parte. La inteligencia no es hacer complejo lo simple, sino sencillo lo complejo. La gran novela de filosofía, ciencia y tecnología del siglo 21. Y con mucho humor negro. Como añadido magistral, la portada diseñada por el director de cine Rodrigo Cortés. Cómo me gustaría ver a Cascaradenuez en una pantalla de cine

ALUCINANTE. Mejo incluso que Tania con i

Este libro me ha marcado totalmente. Primero leí su segunda, Tania con i, con la que me partí de risa, pero es que Tengo Una Pistola no sólo tiene humor de todos los colores, sino una trascendencia y profundidad filosófica que deja huella, pero sin palabrerías retorcidas, propias de los filósofos eruditos, sino explicado y narrado con una sencillez pasmosa. Me recuerda mucho a Matrix en ese aspecto. Rubio me parece el Loriga-Houellebecq-Palahniuk del siglo 21, aunque con una voz totalmente propia. El guardián entre el centeno es una cursilada intrascendente comparada con Cascaradenuez.

Interesante novela.Si Bret Easton Ellis tuviese ahora 30 años, seguramante la habria escrito el.Creo que su lectura atraera mas a jovenes,por las cybercircunstancias sociales de sus personajes.Tiene momentos un poco aburridos,que se pueden tolerar gracias a sus generosas dosis de ingenio,humor y sarcasmo.

Un juego literario entre lo real y lo "virtual". Personajes desubicados del mundo que se inventan la ciber realidad. Aunque a veces resulta un poco reiterativo te engancha. Mantiene la tensión narrativa desde el principio hasta el final. No podemos decir que esté escrito con un estilo brillante, pero emplea las palabras justas y necesarias para contar la historia que cuenta la novela. Enhorabuena Enrique.

hacia falta que la literatura en españa empezara a respirar. No tengo nada en contra de los llamados clasicos, pero es necesaria la entrada de nuevas ideas, formas de narrar, y sobre todo lo que mas me ha interesado la introduccion de los nuevos lenguajes y formas de comunicacion (chats, mesenger, mails), necesitaba leer algo sobre el dia a dia , con situaciones y problemas relacionados con la actualidad y los nuevos modos de comunicacion.

Me parece el mejor libro de estos últimos años en España y si me apurais, fuera de España. Ninguno recoge la actualidad, la era digital como este. Innovador, original, profundo, muy cínico, divertido a más no poder, te toca todas las fibras, lloras y te descojonas al mismo tiempo

Un libro diferente... lo recomiendo al 1000%.. personalmente me ha dado tanto lagrimas como sonrisas... un libro que no te deja indiferente.

A mí no me parece un mal libro. Un estilo, no me atrevería a decir que calcado, pero sí muy insipirado en Chuck Palhaniuk. Quizá en algún otro de los Dangerous Writters. Aunque me recuerda más a Chuck que a, por ejemplo, Tom Spanbauer. Un estilo muy particular que a mí, personalmente, me gusta; pero que entiendo que choque y pueda echar para atrás a algún lector más acomodado a formas más habituales. Mucho mejor la segunda parte que la primera. Si a alguien no le engancha al principio, recomiendo aguantar hasta la segunda parte, donde todo se vuelve más activo, más humano, más interesante... Creo que, al final, deja buen sabor de boca.