Publicado hace ya 25 años, bajo el seudónimo de Marie Hagemann se esconde en realidad la escritora alemana Elizabeth Zöller, autora de numerosos libros infantiles y juveniles; las amenazas que recibió durante sus investigaciones para el libro (basado en hechos reales), motivaron el uso del seudónimo.
La novela está narrada en primera persona por “Lobo Negro”, un joven skinhead alemán que describe su día a día y muestra su situación social y familiar. Resulta terrible leer cómo crece entre el grupo de jóvenes amigos el odio al diferente (materializado contra los turcos) y el fascismo extremo. Leemos cómo se tergiversan incluso hechos históricos (la negación del holocausto) y se alecciona a los jóvenes apoyándose en la idea de grupo, en la sensación de formar parte de algo superior.
El odio, el alcohol y la violencia gratuita están muy presentes en la historia, en la que sus personajes creen a ciegas, sin cuestionarse nada, porque aquel que piensa por su cuenta (como le sucede a Andy, amigo del protagonista) pone en riesgo su integridad.
La novela está enfocada a un público juvenil, abundan los diálogos e incluye un glosario con vocabulario específico sobre el tema. Incluye también las letras de algunas canciones reales del movimiento skin, tremendas. Es una historia interesante, aunque en algunos momentos resulta repulsiva de leer, por las espeluznantes ideas que plasma.