Resumen

La novela de Jesús Tíscar Jandra, preciosista y profunda en el estudio de la lengua, nos da una visión de un submundo cercano, casi familiar, pero un submundo real, malsonante desde el punto de vista de la burguesía, donde el personaje de la poetisa (adviértase el uso irónico de este término) va creciendo, desarrollándose, ocupando espacios, dispuesta a hacer cualquier cosa por satisfacer su canibalismo sexual. Personaje rotundo y redondo, desajustado, como el conjunto de esa porción de realidad tiscariana, porque Tíscar aborda la realidad aquí, como en el resto de sus trabajos, con la responsabilidad del que impone un debate encaminado a cambiar las reglas del juego literario. Una muestra de excelente literatura, sucinta y antibella, contradictoria e irreverente, una visión salvaje del mundo de la literatura y sus infiernos; sin duda, una novela diferente y difícil, arriesgada en sus propuestas pero que cristaliza de forma magistral en estas páginas.

1 Críticas de los lectores

10

Divertida. Divertido uso del lenguaje. Divertida trama, inimaginable imaginación la de este autor. Un libro para desmontar uno, dos, tres prejuicios seguidos sobre la hipócrita burguesía urbana afecta a la costumbres más enraizadas y roñosas. En una ciudad de provincias donde sólo había poetas apareció la poetisa, agachada y preparada para que la Gran Musa de la Poesía le propinase el primer empujón. Y enculada, apareció la poesía, apareció la poetisa, toda ella, toda poesía, toda puta...

hace 16 años