En los momentos más inesperados puede aparecer la «presa» perfecta. Tú eres un luchador, está en tu ADN y tu instinto te avisa sin que puedas apartar la vista de ella. Pero ¿estás preparado para darle caza? Debido a tus ansias de pillar cometerás algún error que hará que ella huya despavorida. Domin...