Vestido con leotardos y capa y con un orinal en la cabeza a modo de casco, convertido en un superhéroe que se llama capitán Carpeto: así termina un apacible viudo que pierde el juicio por la lectura compulsiva de cómics... Conspiraciones y batallas, superpoderes, mutantes, disparates sin cuento en un desternillante homenaje al Quijote que se publicó por entregas en el diario 20 minutos y que constituye, como su referente, una crítica mordaz a la sociedad contemporánea.