Al fin! Estamos ante una novela muy exigente para el lector. En mi opinión hay que haber leído mucha ciencia ficción para llegar a saborear verdaderamente lo que te propone Cixin Liu, pues es tremendamente ambicioso en su plan: Estamos hablando de que la novela te relata el futuro de la humanidad durante sucesivas eras que abarcan millones de años, y en todas ellas el autor ofrece una visión posible del devenir social, económico y tecnológico de la raza humana, pero la narrativa esta vez fluye de un modo casi poético, narrado desde el punto de vista de una chica, Cheng Xin, y su extraña y hermosa relación con Yun Tianming, cuyas motivaciones puede que no entendamos del todo durante las más de 700 páginas de la novela...
Y es que los personajes de Cixin Liu navegan entre escalas de grises; entre el error y el acierto, motivando nuestro amor y nuestro odio a partes iguales, son muy orgánicos, y eso hace a veces que resulten complicados, más aún si unimos la dificultad de entender el pensamiento oriental a ojos del mundo de occidente. En mi opinión Cheng Xin no es el gran personaje de esta trilogía, ése honor sigue recayendo en Luo Ji, manifestándose Cheng Xi como un ser inocente e infantil que tiene que enfrentarse a disyuntivas demasiado imponentes para ella (y cualquier ser humano normal) y que afectan a la supervivencia de la humanidad primero, del sistema solar después y del universo en último término. Sí, ésta novela es así de ambiciosa...
Sobre conceptos tecnológicos y físicos...Cixin Liu puede llegar a pecar de demasiado imaginativo, casi fantasioso, pues se mete en un futuro que escapa a lo que podemos imaginar, pero le busca una explicación lógica y enlazada con la física teórica de vanguardia: Criogenización, dimensionalidad, robótica, física cuántica, ondas gravitatorias, agujeros negros (esta parte me resultó fascinante, y muy bien explicada), viaje hiperlumínico, motor de curvatura... Si pensabas que con los sofones (yo aún sigo sin comprender su mecánica del todo) tu cerebro no iba a poder asimilar más elucubración científica, esto no es más que el comienzo, pues al bueno de Cixin le queda especulación para rato, y el concepto estrella de esta novela, que deja casi en pañales la teoría del bosque oscuro es... EL DOMINIO NEGRO. Lo que se monta en la cabeza el bueno de Cixin Liu para explicar sus teorías sobre la manipulación de la velocidad de la luz en el vació es digno de admiración, y del MIT...
Y es que de eso va verdaderamente esta novela. No va sobre una invasión alienígena, eso para Cixin no es más que el contexto ( y está ya muy visto), el punto de partida, su gran WHAT IF... sobre el cuál crear su gigantesca space-ópera Sci-fi especulativa espacial del futuro para dar rienda suelta a una imaginación portentosa. Tanto es así que terminaremos de leer la trilogía y apenas tendremos unos pocos detalles sobre los trisolarianos, que no son más que un telón de fondo.
LO MEJOR: Me apasionaron los cuentos de Tianming para explicar las soluciones al ataque de bosque oscuro... Intentar descifrarlos por mi cuenta fue un auténtico reto. Me pareció una propuesta de lo más original, dentro de lo original e imprevisible que es la novela.
LO PEOR: He leído una treintena de novelas de Ciencia ficción antes de llegar a Cixin Liu (Incluyendo a Asimov, Clarke, Niven, Kim Stanley Robinson...). Ésta es la más difícil y ambiciosa a la que me he enfrentado. He tenido que releer capítulos enteros para sentir que me enteraba bien de los detalles y... ¿Me ha merecido la pena? Rotundamente sí, pues pocas cosas han estimulado más mi imaginación, pero comprendo que esto puede requerir de un esfuerzo que a muchos puede que no les compense.
Para mí, desde luego, esta obra pasa a formar parte de los grandes clásicos de la Ciencia Ficción. IMPRESCINDIBLE.
hace 3 años
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