Prosa de gran calidad y argumento original, aunque no consiguió conquistarme del todo.

Interesante historia. La forma en que el autor nos narra la novela es rica en poesía por sus descripciones de paisajes, sentimientos, pensamientos, incertidumbres, etc.... Recomendable para los amantes del thriller y para los que no, porque no falta una dosis de amor, de enamoramiento y incluso, tiene su parte erótica.

El descubrimiento del año, sin ninguna duda. Una novela que lo tiene todo, una obra de arte del misterio.

Los responsables editoriales la han catalogado como thriller, y a lo que yo, bajo mi modesta opinión, no estoy muy de acuerdo. Es una novela diferente del thriller normal y corriente, aunque pensándolo bien, quizá por ello ponen en la publicidad del libro, “una vuelta de tuerca al género del thriller”. La sinopsis del libro dice así: “Adiel es un joven huérfano que nunca llegó a conocer a su padre; de su madre, que murió a los pocos años de darle la vida, apenas conserva algún vago recuerdo. Al amparo y cuidado de su tutor, Tito Donabella, propietario de una modesta joyería en un modesto pueblo de ninguna parte, ha crecido llevando una tranquila y anodina vida, pero un día todas las certezas en las que ha creído comienzan a desmoronarse irremisiblemente. La causa de ello será la misteriosa aparición de un hombre en la joyería y el extraño encargo del que les hará responsables tanto a Adiel como a Donabella: cuidar de una pequeña caja marrón que nunca, bajo ninguna circunstancia, deben abrir hasta que él se lo indique. ¿Pero qué contiene la caja? Un legado maldito: vidas robadas en el pasado... “. No pongo ni quito una coma más a esta sinopsis de la propia editorial, porque pienso que es un libro que debe ser descubierto por el lector de manera particular, son tantísimos los matices que pueden encontrarse en él, que si hiciera cien reseñas distintas, cada una de las mismas sería diferente a la anterior. En el libro hay tanta buena literatura que estoy seguro que será un libro de referencia para muchos jóvenes, y no tan jóvenes, novelistas. Cuando empiezo un libro siempre espero hallar algo que lo haga diferente a los demás. El problema es que casi nunca ocurre, y termino con la sensación de que he perdido la oportunidad de encontrar una historia que merezca la pena. Con “El Cementerio de la Alegría” me he llevado la enorme alegría de encontrar una obra que me ha hecho disfrutar como hacía muchísimo tiempo que no me ocurría con un libro. Es una verdadera “artesanía”, literatura de la más alta calidad, muy amena y con un final de los más espectaculares que he leído en mi vida, y créanme, he leído muchos libros. Recomendable al cien por cien, sin duda de ningún tipo.