En un tiempo sin internet, youtubers ni wikipedias, el paso de las historias de los grandes deportistas hasta convertirse en mitos se hacía mediante relatos de una memoria sentimental y objetos que la atesoraban, como los cromos. De la misma forma que un niño juntaba e intercambiaba esos cromos con las imágenes y las hazañas de dichos héroes del deporte, con el afán y la emoción del coleccionista adulto, sus biografías y sus triunfos quedaban grabados al fuego de la nostalgia y con el ritmo de otros tiempos. Aquí, el prodigio de la memoria de Andrés Amorós —?y la viveza de las ilustraciones a color de Carbajo?— nos reúnen a una treintena de deportistas de todas las disciplinas: fútbol, tenis, automovilismo, ciclismo, atletismo, baloncesto, boxeo… desde Jesse Owens o Lilí Álvarez hasta Gordillo o Dražen Petrovi?. Todos ellos son recordados con relatos originales, llenos de gracia literaria y valiosos testimonios; en definitiva, con la memoria del corazón.