El tema de las Autonomías -el más vivo y conflictivo de la transición española- está tratado en este libro de Juan Beneyto en sus aspectos teóricos, históricos y políticos. El planteamiento actual de las Autonomías en torno a la nueva Constitución española sugiere su estudio profundo. El autor expone su vasta problemática, desde la nomenclatura hasta las identidades regionales, sin olvidar el contrapunto de los Municipios. La consideración de los aconteceres y del perfil de las instituciones le hace subrayar la equivocidad de ciertas estructuras virreinales y la realidad autonómica de aquellas en las que su personalidad derivaba de la consistencia de los Parlamentos, tan brillantes en la Corona de Aragón y nunca permitidos en las tierras de las Indias. La uniformidad se logra por la fuerza, y así puede decirse -y lo dice Juan Beneyto en frase muy expresiva- que la centralización, tal como él documenta, no es sino una ocupación a distancia. La pérdida del poder propio de cada comunidad humana va ligada a la patrimonialización del Estado por las grandes familias titulares de las Coronas europeas. Los teorizantes sirvieron a los reyes, y la vieja respublica perdió entidad al centrarse la política en la relación entre dominadores y dominados, convirtiendo a los ciudadanos en súbditos. Los últimos capítulos de la obra están dedicados al examen de la situación presente. Desde las Cortes de Cádiz, lo que ocurre es Política, además de ser Historia. Tras el franquismo, las pretensiones de la Oposición que negocia el tránsito toman nueva figura en las concesiones de la Monarquía restaurada. Para Beneyto, la existencia de dos talantes demasiado calificados hacen imposible, de momento, ese poder regional que la Constitución ha previsto. Juan Beneyto, doctor en Derecho por la Universidad de Bolonia y en Ciencias Políticas y Económicas por la de Madrid, ha simultaneado la actividad docente con la publicación de numerosas obras y artículos.