Es fácil poner una etiqueta a un niño, pero es muy difícil quitarla. ¿Y si dejamos de etiquetar a nuestros hijos? Simpático, conflictivo, pesado, divertido, perezoso, activo, aventurero, comilón, pesimista, alegre, impulsivo, inconsciente, nervioso, constante, trabajador, holgazán, etc. Utilizamos e...