Alístate en el Ejército. Tomarás té con un ex ministro talibán que te dará clases de geoestrategia sobre un tablero de ajedrez. Asistirás a clases prácticas de tortura dirigidas a humillar a niños ricos saudíes en sus vacaciones terroristas. Fumarás hachís frente a un cementerio soviético de aviones...