(a partir del cuento original La Cenicienta) Había una vez un joven al que todo el mundo llamaba Ceniciento porque siempre estaba sucio y polvoriento. Pero es que limpiaba chimeneas, cocinaba, lavaba la ropa, barría, fregaba toda la losa, cosía planchaba, sabía de pintura , arreglaba tuberías y saca...