¿Quién no ha jugado en su infancia a policías y ladrones? Pero en el caso del niño afrikáner Boetie Swanepoel, el juego ha ido demasiado lejos. Cuando su cadáver aparece mutilado en una plantación a las afueras de Trekkersburg, todo hace pensar en la obra de un pervertido sexual: hasta que la aparic...