Sergio C. Fanjul nos lleva, a través de sus relatos, a un mundo extraño, y a veces terrible, en el que la próxima Teoría del Universo se está cocinando en la trastienda de una hamburguesería de un polígono industrial de Alcorcón; amables y educados fantasmas pasan el tiempo tomándose un gin-tonic en la cafetería de unos grandes almacenes madrileños y los buzones de correos están habitados por solícitos personajes que corrigen la correspondencia para mejorar la comunicación entre los seres humanos.
El libro está ilustrado por Cristóbal Fortúnez