Febrero de 962. Asur, Munnio, Gundisalvo y Mudarra, acaballeros cillanos de Castilla, persiguen a la partida de leoneses que les ha robado un rebaño. Tras recuperar parte del botín, cometen un grave error: ejecutan al cabecilla de la algara, un conocido conde de la frontera. Condenados a un castigo...