Es difícil ser la pequeña en una gran pandilla, y más aún en la inmensa jungla... Pero cuanto más pequeño eres, más grandes son tus aventuras y más emocionantes tus retos. Pequeña en la jungla nos enseña que el mundo es un lugar gigantesco, salvaje, maravilloso y lleno de retos. Y no importa lo pequeño que seas, solo tienes que perder el miedo y alimentar tu curiosidad para conseguir lo que te propongas.