No solo mueren periodistas en el fuego cruzado de las guerras. También mueren por informar, por denunciar la corrupción de los políticos, la delincuencia de las mafias, los abusos de toda índole de los poderosos. El asesinato de Anna Politovskaia fue noticia de portada en todo el mundo. Pero hay muchísimos más profesionales de la información que han sido víctimas de quienes quisieron hacerles callar para siempre. Matar a un periodista. El peligroso oficio de informar reconstruye las historias de unos profesionales de la información cuyo único crimen fue contar lo que sabían. Las historias de Politovskaia y de otros seis periodistas de Colombia, Rusia, Filipinas, Bangla Desh e Irak, fueron investigadas donde ocurrieron durante cuatro años por Terry Gould, que en este libro las cuenta en un ejercicio excepcional de periodismo narrativo.