Cuando Linnea llega a Alamo, no imagina que el hombre irritado que la recibe en la estación de tren se convertirá en su gran amor. Con sólo dieciocho años, la vehemente y alegre Linnea es la nueva profesora y está decidida a conquistar un lugar en la familia que la acose, así como dentro de la comunidad. Theodore es un granjero de treinta y cuatro años que vive con su madre y su hijo de dieciséis años. Al igual que los demás granjeros, Teddy se ocupa fundamentalmente de la cosecha, y cuando Linnea llega a vivir a su casa, se siente invadido e irritado porque la joven no respeta las reglas tácitas de la comunidad. Lentamente, en medio de las tareas cotidianas, surge entre ellos un amor profundo. Atemorizado por la diferencia de edad entre ambos, Teddy intenta alejarse de Linnea. Pero ella está dispuesta a aceptar el desafío porque sabe que él es su destino.